Para terminar de complicar más la cosa volvimos a tener otro episodio de esa pesadilla recurrente que es el despertador de Sandra: cuando quiere no suena.
- Zzzz
- Snif, Snif ( que bien se esta en la cama)
- Oye tu...
- Snif, Snif
- ¿Estas despierta?
- Snif, Snif... ahora si
- ¿Qué hora es?
- las 10!!!!
- xXXxxXXX... te mato!!!
Salimos corriendo aunque ya sabemos lo que va a pasar. ¡Se masca la tragedia!
En un rato estamos en Torrestio y poco después llegamos al Puerto de la Mesa. Llevamos buen ritmo y el tiempo parece que aguanta. Por un momento empezamos a pensar que saldremos impunes de nuestra temeridad.
El entorno es increíble pero la llegada al Puerto de San Lorenzo se nos empieza a hacer largaaaaaa.
Los últimos kilómetros antes del Puerto de San Lorenzo se nos hace interminables aunque ahora vamos corriendo todo el rato.
Finalmente llegamos al Puerto de San Lorenzo con la lengua fuera y, como si fuese una demostración práctica de la ley de Murphy, empieza a llover y a granizar.
Durante unos instantes observamos como la gente que esta en el mirador del puerto corre a resguardarse a su coche. A nosotros nos quedan casi 25 km de vuelta con lluvia y dentro de poco se hará de noche. "Más se perdió en la guerra" así que empredemos el camino de vuelta corriendo entre risas... y gotas de agua :-)