lunes, 31 de marzo de 2008

Puig Campana

A veces hay que salirse de los grandes sistemas montañosos para encontrar verdaderos gigantes. Muy lejos de los colosos de Pirineos o del Sistema Central el Puig Campana es una mole de roca caliza que levanta sus 1.406 metros a tan solo 10 kilómetros de la costa y cuyas paredes verticales retienen nuestra mirada.



Nos decidimos a ascenderla en invierno para evitar calor y la masificación que hay en esta zona en verano y el día 23 de febrero, a primera hora de la mañana, estábamos listos para comenzar la ascensión.



Un tranquilo paseo a través de un bosquecillo nos llevó al inicio de la empinada pedrera pasando por varias zonas de escalada deportiva.





Desde allí pudimos observar las vistas de la comarca y tomar un respiro antes de comenzar la pesada subida.




Una vez en la cumbre pudimos observar las vistas que nos rodeaban, un espectáculo sobrecogedor en todas las direcciones.



El Peñón de Ifach (Calpe) y Benidorm frente a nosotros.





Toda la costa levantina a nuestros pies.





Y la sierra de Aitana a nuestra espalda.

martes, 25 de marzo de 2008

El invierno fanfarrón

El frío nos sorprendió a finales de octubre en el valle de Arán y nos hizo pensar este invierno haría la nieve casi inmortal, infinita; nos frotábamos las manos por el frío y por la esperanza de tener una gran temporada de nieve. Las nevadas en Pirineos llegaron durante las primeras semanas de noviembre, justo después de volver de allí; las seguimos con envidia. Tuvimos que esperar hasta diciembre para que el Sistema Central se cubriese de blanco y cada día mirábamos el color blanco de la montaña, casi con avaricia, esperando que llegase el fin de semana.

Y después... nada.

Las temperaturas subieron y las precipitaciones fueron escasas. Cada día que nos acercamos a la montaña había menos nieve y acabamos saliéndonos de los caminos para pisar algún pequeño nevero y acordarnos de que aún estábamos en invierno. El tiempo se ha vuelto loco y el invierno jugaba a despistarnos.

Ahora miramos con desconfianza a las nieves que ha dejado el último temporal, sin atrevernos a compararlas con aquellas de abril del año pasado que enderezaron la temporada. La única verdad es que el invierno ha acabado y no ha sido blanco.

Sábado, 12 de enero
Ascensión a Peñalara desde el puerto de Cotos

Frío y nieve en Navacerrada, las nieves habían llegado a Guadarrama.



El circo de Peñalara estaba a punto.





Y la laguna de los Pájaros completamente helada.



El sol se atrevía a salir timidamente sobre el Risco de los Claveles.



Ya en la cumbre observamos la Bola del Mundo y la Mujer Muerta enredada en nubes.







Bajando hacia Cotos por Dos Hermanas no podíamos imaginar que ese sería nuestro mejor día de invierno.



Domingo, 10 de febrero
Ascensión a Cabezas de Hierro desde el puerto de Navacerrada

Cuerda Larga, tan blanca desde lejos y tan vacia de cerca. Las únicas palas de nieve decebtes eran el dominio de los esquiadores de Valdesquí y se mantenian con vida de modo artificial.





La cara norte de La Maliciosa parecia llamarnos, cargada de nieve, pero era, probablemente, solo un maquillaje blanco. La cara sur, totalmente seca; no probaríamos este año sus tubos.



Volviendo la cara a nuestro objetivo, encotrabamos otra vez Cabezas de Hierro



Y, siempre a la izquierda, Peñalara. Muy diferente de la que dejamos apenas unas semanas.



Seguimos nuestro camino, pasando por Cabezas de Hierro Menor.





Y coronamos Cabezas de Hierro Mayor, desde donde las vistas eran estupendas.






Ya de vuelta encontramos Siete Picos, triste, despidiendo el día.



Domingo, 17 de febrero
Ascensión a el Cerrón desde puente de la Hiruela

La nieve nos había dejado definitivamente, aunque el frío y la niebla volvieron por la tarde para recordarnos su pérdida.














Domingo, 2 de marzo
Ascensión al Rocín y la Cebosa desde Peñalba de la Sierra

Después de un comienzo dificil contemplamos el Rocín y La Cebosa desde Peñalba de la Sierra.



Desde la Morra del Segoviano observamos las últimas nieves de Guadarrama.



Seguimos camino de La Cebosa.







Después, en el Rocín, contemplamos el valle del Cañamares.









Sábado, 8 de marzo
Ascensión al Montón de Trigo por el valle de la Fuenfría

Un anticipo de la primavera ha llegado a Cercedilla.



Desde el puerto de la Fuenfría nos saludan los gigantes de Guadarrama: Peñalara, Cuerda Larga y Siete Picos.





También nuestro Montón de Trigo, desnudo.



Alcanzamos su cumbre desde donde parece que casi podemos tocar la Mujer Muerta con las manos.